Alineación UD Rosario
Juan; Tato, Elías (J. Miguel), Gordillo, Veleta; Jero, Diego, Raúl (Rubén), Jesús (Rando), Óscar (Jorge); Toble (Alberto)
Paseo triunfal del Rosario en su debut como local, que no en casa, de esta temporada. Desde el principio se pudo constatar que los debutantes del Cuevas de San Marcos necesitan mucho trabajo para comenzar a ver frutos. Probablemente el partido de vuelta nos encontraremos un equipo radicalmente diferente.
El encuentro que este domingo se vio en el Trabuco sólo tuvo una dirección y, con un equipo muy distinto al de la jornada anterior en Almogía, los saucedeños se gustaron durante los 90 minutos hasta llegar a un marcador que difícilmente repetiremos esta temporada (ojalá me equivoque).
La primera parte demostró que lo que se vio la jornada anterior no era el reflejo de las posibilades del equipo. En este periodo, el Rosario buscó siempre sacar el balón por el suelo e hiló varias jugadas de mérito que desembocaron en peligrosas entradas por banda. Los laterales cueveños se veían continuamente desbordados. Su área era bombardeada con centros y penetrada con pases interiores que provocaron que el jugador con más cansancio acumulado de los visitantes fuera el portero.
Con este panorama los goles no podían hacerse esperar. El primero lo consiguió el Toble aprovechando un centro medido de Jesús que sólo tuvo que empujar de cabeza. La cuenta la continuó Raúl (gran fichaje "extracomunitario" del otro lado del puente) con un golpeo a bote-pronto antológico desde fuera del área tras una jugada de Diego digna de mención con ruletas, agarrones y quiebros que dejaron hasta a 3 rivales preguntándose qué había pasado. Los dos tantos restantes antes el descanso significaron el primer hat-trick del Toble en la UD Rosario. Dos goles de muy diferente factura pero ambos denotando la sangre de killer que corre por sus venas (cualquiera lo diría). Un taconazo como único recurso para dirigir el balón hacia el objetivo y un remate con no se qué en el segundo palo tras una falta hicieron vibrar a más de uno en la grada.
Con los deberes hechos se volvió de los vestuarios y la segunda mitad, aunque perdió algo de ritmo, mantuvo el dominio aplastante de los locales que ampliaron su ventaja con goles de Diego y Rubén de cabeza tras jugadas a balón parado siendo este último quien cerró la cuenta con un centro que terminó, inesperadamente, dentro de la meta cueveña tras envenenarse por el camino.
Poco más que decir de este choque salvo que, esperemos, sirva para olvidar definitivamente el fastuo debut y presentarse ante uno de los gallitos de la categoría (su plantilla así lo atesora) con la ilusión de plantarles cara y, por qué no, intentar rememorar el partidazo del año pasado en Almargen. Poder se puede.
El crack: Toble. Ejerció de matador y propició apoyos a la media moviendo la pelota con fluidez. Incluso se peleó con los centrales rivales y no dio ningún balón por perdido. Un partido soñado que terminó con una ovación del respetable. Enhorabuena.
La megacrack: Encarni. Cuando una jugadora debuta en una categoría donde no creo que haya muchas más jóvenes que ella y, no contenta con ello, se destapa con un hat-trick a domicilio que sirve para que se equipo (CD Trabuco femenino Fútbol-7) consiga una victoria (3-5) en uno de los campos históricos de la capital (Segalerva), significa que no sé donde podrá llegar porque el fútbol, y más el femenino, es un deporte del que dependen muchos factores para triunfar, pero calidad la tiene, ilusión le sobra y compañerismo lo demuestra cada día. Sigue así y disfruta cada minuto como lo has hecho hasta ahora.
La primera parte demostró que lo que se vio la jornada anterior no era el reflejo de las posibilades del equipo. En este periodo, el Rosario buscó siempre sacar el balón por el suelo e hiló varias jugadas de mérito que desembocaron en peligrosas entradas por banda. Los laterales cueveños se veían continuamente desbordados. Su área era bombardeada con centros y penetrada con pases interiores que provocaron que el jugador con más cansancio acumulado de los visitantes fuera el portero.
Con este panorama los goles no podían hacerse esperar. El primero lo consiguió el Toble aprovechando un centro medido de Jesús que sólo tuvo que empujar de cabeza. La cuenta la continuó Raúl (gran fichaje "extracomunitario" del otro lado del puente) con un golpeo a bote-pronto antológico desde fuera del área tras una jugada de Diego digna de mención con ruletas, agarrones y quiebros que dejaron hasta a 3 rivales preguntándose qué había pasado. Los dos tantos restantes antes el descanso significaron el primer hat-trick del Toble en la UD Rosario. Dos goles de muy diferente factura pero ambos denotando la sangre de killer que corre por sus venas (cualquiera lo diría). Un taconazo como único recurso para dirigir el balón hacia el objetivo y un remate con no se qué en el segundo palo tras una falta hicieron vibrar a más de uno en la grada.
Con los deberes hechos se volvió de los vestuarios y la segunda mitad, aunque perdió algo de ritmo, mantuvo el dominio aplastante de los locales que ampliaron su ventaja con goles de Diego y Rubén de cabeza tras jugadas a balón parado siendo este último quien cerró la cuenta con un centro que terminó, inesperadamente, dentro de la meta cueveña tras envenenarse por el camino.
Poco más que decir de este choque salvo que, esperemos, sirva para olvidar definitivamente el fastuo debut y presentarse ante uno de los gallitos de la categoría (su plantilla así lo atesora) con la ilusión de plantarles cara y, por qué no, intentar rememorar el partidazo del año pasado en Almargen. Poder se puede.
El crack: Toble. Ejerció de matador y propició apoyos a la media moviendo la pelota con fluidez. Incluso se peleó con los centrales rivales y no dio ningún balón por perdido. Un partido soñado que terminó con una ovación del respetable. Enhorabuena.
La megacrack: Encarni. Cuando una jugadora debuta en una categoría donde no creo que haya muchas más jóvenes que ella y, no contenta con ello, se destapa con un hat-trick a domicilio que sirve para que se equipo (CD Trabuco femenino Fútbol-7) consiga una victoria (3-5) en uno de los campos históricos de la capital (Segalerva), significa que no sé donde podrá llegar porque el fútbol, y más el femenino, es un deporte del que dependen muchos factores para triunfar, pero calidad la tiene, ilusión le sobra y compañerismo lo demuestra cada día. Sigue así y disfruta cada minuto como lo has hecho hasta ahora.
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