LAS CLAVELINAS, UN FORTÍN

Los 2 partidos de este fin de semana se saldaron con 2 victorias que, unida a la de los cadetes, corroboraron una jornada perfecta para nuestro club. Los 3 equipos se mantienen arriba y nos permite seguir soñando con una temporada llena de emociones y, ojalá, algún ascenso.

U.D. ROSARIO 2 - 0 C.D. CAMPILLOS

El sábado se presentaba en nuestro campo un rival muy complicado, Campillos, que no conocía la derrota en sus 7 partidos previos y venía de ganarle al hasta ahora líder, Sierra Yeguas. El Rosario intentó que el rival no se sintiera cómodo desde el inicio y, fruto de ese arranque, a los 10 minutos se encontró con un penalti que el portero visitante le adivinó a Rubén dejando claro que la cosa no iba a ser nada, pero que nada fácil. Lejos de venirse abajo, los saucedeños siguieron empujando y, 15 minutos después de su error, Rubén lo enmendó de la mejor manera posible. Un saque de banda sin aparente peligro, lo controló el capitán en el vértice derecho del área y, sin dejarla caer, enganchó una volea espectacular mandando el balón a la escuadra haciendo imposible la estirada del portero. Hasta ese momento los campilleros no habían dado señales de vida, pero el gol en contra les despertó y comenzaron a adueñarse del centro del campo haciendo valer su mayor poderío físico. De esta forma consiguieron que los últimos 10 minutos de la primera parte se les hicieran muy largos a los saucedeños que vieron seriamente peligrar la ventaja obtenida. Entre Manuel, "la araña roja", otra vez espectacular y el palo impidieron que los visitantes se llevaran un empate al descanso.

La segunda parte se derimió de una manera que resultaba lógica, Campillos apretó buscando el empate y los saucedeños, se intentaban hacer fuertes en defensa y salir rápido buscando las contras. Con este guión, las oportunidades caían con cuentagotas para ambos equipos y las pocas, aunque claras para ambos equipos, las desaprovechaban unos, para tranquilizar el partido y otros, en pos de puntuar en un campo que, otro año, resulta muy difícil para cualquier equipo. Hasta el minuto 80, donde Germán le robó la cartera a un defensa y asistió perfectamente a Tato, que definió con gran tranquilidad y consiguió que, por fin, la gente respirara y disfrutara de una victoria muy trabajada y merecida, aunque un empate tampoco hubiera sido del todo injusto, pero en partidos tan igualados los detalles son los que deciden y, en esta ocasión, favorecieron a los nuestros.

UD ROSARIO 1 - 0 ALMOGÍA ATL.

Este domingo, la jornada se presentaba festiva y sin muchas complicaciones, a priori, para completar el hat-trick de victorias debido a que Almogía parecía que no iba a dar mucha guerra viendo sus resultados y clasificación (antepenúltimos con sólo una victoria). Pero en esta categoría no te puedes fiar de nadie y, mucho menos, relajarte dando opciones a un rival que, sin ser nada del otro mundo, estuvo a punto de dar un disgusto a la afición saucedeña.

El partido empezó con el Rosario dominando sin problemas, aunque el ritmo del partido no era todo lo fuerte que otras veces han imprimido los nuestros en los primeros minutos. Tras 2 ocasiones claras de gol, un gran pase de Diego de 40 metros, lo aprovechó con finura Jero que, sin parar el balón le colocó una vaselina que, además del gol, hizo que el portero visitante, en una acción de mala fortuna, resultara lesionado al intentar atajar la pelota. Quedaban 20 minutos y el partido pintaba bien, sobre todo, cuando poco antes del descanso un penalti del portero a Veleta que Diego, imitando a Rubén, no materializó gracias a una buena estirada del portero visitante que dejó claro que este fin de semana era en el que resultaba imposible meter una pena máxima.

En el segundo período, tanto el ambiente como el partido se congelaron, los saucedeños se dejaron llevar por el ritmo cansino de los visitantes y, aunque seguían dominando y teniendo alguna que otra ocasión clara, no se veía que Almogía hubiera dicho su última palabra y, con sólo un gol de renta, cualquier despiste puede significar 2 puntos menos en el casillero. Y cuando se rozaba el minuto 90, tras haber avisado en un par de ocasiones, los almogienses tuvieron su gran ocasión cuando un delantero visitante falló, inexplicablemente, en el borde del área pequeña, un balón que dejó más helado si cabe a un público que ya se disponía abandonar el campo.

Partido más sufrido de lo esperado pero que, al fin y al cabo, se ganó que es lo que cuenta y nos permite seguir arriba en la tabla.

¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡VAMOS MI ROSARIO!!!!!!!!!!